Vacío
Corre el viento
Y se anida en mi bolsillo de deudas.
Pasa el hombre su destino
Contando números que nunca terminarán
De aparecer en los calendarios.
Estoy aquí como si esperara
El momento adecuado para despedirnos,
Estoy aquí
Y tranquilo sigo aunque el tiempo sea violento
Y tus labios no den conmigo.
¿Será que las rosas
No durarán por siempre adornando
Los humildes sueños que guardé para ti?
Tristes se irán los perros vagabundos
A comer de otro plato,
Y nadie más ha de morderse la carne
Para vivir un día más
Dentro de esta habitación.
¿Quién te dibuja por las tardes
Y en silencio sus aventuras pasa?
Nadie sabrá sobre la misteriosa sombra
Que me atormentaba
Con su sonrisa de invierno.
Nadie saldrá con sus
¡Buenos días!, ¿cómo está?, ¡qué le vaya bien!
¡Espero verlo otra vez por aquí…!
Llora el cuervo desangrado
Sobre mi sagrado ritual de orquídeas.
En blanco y negro
Me muevo entre un centenar de papeles
Que llenan mis ojos
De versos apagados.