MÓRBIDO AMOR

A veces cuando me derrumbo frente a la fría respuesta,
Te pienso como cordial, cándida y atenta.

Y a veces cuando recuerdo que fuiste flor eterna,
Te quiero pero en silencio, casi muerta, toda tierna.

Hay días en que espero que vuelvas como en los campos,
Con gran humildad por la carne y rojos labios pardos,
Y creo que sé de qué hablo cuando firmo que no existes,
Prefiere olvidar lo que hiciste y de paso te haces daño.

Me obligues a tenerme a tu lado, con arma de solo el silencio,
Me quemen los puños y el pecho por aniquilarte el orgullo,
Ni modo la deuda fue cara, nuestro idilio lo pagó sin recargo,
Te dejo victoria absoluta, la deuda de amor ya saldada.

Al fin que han de pasar los años y el espíritu reprime,
Yo dudo pronto te olvide aunque así te quiero en vano,
Espero se muera el chantaje y vueles de ignorancia libre,
Despiertes cuando me perdiste, te mires llorando las manos.

Comentarios & Opiniones

Hechicero de Dragones

Me ha gustado, poema bien estructurado, buena técnica y sobre todo uso de palabras que le dan elegancia a este poema plegado de cuestionamientos y nostalgia. Saludos!!

Critica: