Poesía de libisarenas

Martes, Mayo 27, 2014 - 15:45
Desahogo
En la madrugada del lunes un desgraciado tiburónme mordió una pierna, fue tanto el desesperoque me tire a un caño de estiércolporque me dijeron que era un buen antídoto para la mordida del tiburón.El tiburón murió por el apestoso olor putrefacto,aquí no acaba la historiaresulte muerta también por eso desde el infinito y mas aya les aconsejo que se alejan del lagarto.