Reflexiones Bajo Sombra

Podría iniciar suponiendo que lees estas líneas
Solo falta un poco de contexto y ambiente
También algo de mañanas y una pizca de ayer
Para decirte con firmeza: “es esto el ahora”.
Muchas bolsas han pasado volando por el viento
Al igual que el polvo acumulado del desierto
Sí, aquel que no tiene reparo en los recuerdos
Aquel mismo que canta susurros abandonados.

¡Cómo olvidar aquel abrazo por la espalda
Donde ni el tiempo se había percatado!
Qué ironía, ¿no crees? Pues el tiempo estaba
Pero no éramos nada para sus juegos
Y ahora que somos sus juguetes favoritos
Nos alejamos cada vez más, como ráfagas
Perdidas en las músicas líquidas del río
Sí, este mismo llevador de deseos.

Podría pensar tantas cosas en este momento
Y recordar cada paso que dimos juntos
Pero es claro decir
Juntos pero nunca unidos
Juntos en el olvido
Juntos en los deseos
Juntos en los miedos y orgullos
Pero unidos en los sueños aun por venir.

Pero ahora no pienso en ese “nosotros”
Al menos por ahora, me he rendido
Me siento tan desolado bajo esta sombra
Y sé que la has de reconocer, pero sin recuerdo.

Fue en este asiento cuando nos dijimos todo
Fue esa sombra la que refrescaba aquellos años
Fue ese río el que escuchó y se llevó esa voz
Fue ese tiempo cuando nos necesitábamos sin hablar.
Y ahora, bajo esta misma sombra estoy solo
Sabiendo que te fuiste por ti o no
Recordando aquella tarde de febrero
Que se hacía marzo a cada paso.

Aquella tarde donde nos juramos ese amor
Lleno de complicidad y lejano a la visión
Nos besábamos con la mirada apasionada
Pues nuestras bocas mascaban deseos de antaño.
Nos abrazábamos con ese pequeño silencio
Pues nuestros brazos se ocupaban del pasado
Con cada palabra nos condenábamos el uno para el otro
En una humildad forjada por nosotros
Ausentes, como nuestro afecto físico
Latente, como nuestro amor condenado.
Es por eso que te digo lo mucho que te odio
Odio tener que sentirme enamorado de ti
Y no poder besarte con los labios, pues la mirada
¡Oh, mirada! Es tan traicionera y lejana
Es por eso que ahora estoy solo
Te alejaste de este desierto
Y la brisa del mar te cobija ahora
Así como traicionando tus palabras calladas.

Estoy bajo esta sombra contemplando al viento
Vestido de un multicolor sabor a nostalgia
Y a sequedad y a tradición y obvio, a ti
Pues siento las morenadas y las diabladas
Quemando el pasado con color de fuego
Y escucho los tobas y los tinkus alegres
Incitándome a mirarte y recitarte verdades
Pues este mate tiene el sabor de tus besos negados
Y por ello lo sigo tomando, para recordar ese…
Amor condenado
Que es lo que es y nada más
Que es lo que fue y lo será
No será más que una red de sucesos vagos
Como lo fueron mis versos enviados en una caja.
No será más que palabras sacadas de palabras
Como aquel collar de arroz escrito sin nombre.
No será más que una mirada furtiva
Como aquella tarde de hace nueve años.
No será más que este mate en mi mano
Que tiene el sabor de los besos que siempre quise darte
Y nunca lo hice
Pero te los di con mis miradas silenciosas
Y sé que también que con ese miradas,
Con ese silencio tan tuyo, los recibiste.