TODO MENOS YO

Al borde de un puente, lleno de escoria,
falto de agua,
lento, sin nada, con nadie,
sin cargas, sin aire;
entre el brillo de mis ojos
noto mis últimas gotas
derramadas en mis pómulos
hasta el suelo y el río
donde reflejo mis tristezas
queriendo ahogarlas
hasta hundirme con ellas [en ellas].
Mis brazos tensos, acabados,
mis hombros, débiles,
mi mente ensoñada
de tanto y tanto, de tanto
sin nada
se quedó mi alma
en donde mis pasos
dejaron de marchar cerca del abismo
cerca de lo que me acabó.
Por fin.

Comentarios & Opiniones

Andrés Orozco Echeverri

Un escrito que rescata el género de la tragedia, comunica de manera irónica pero patente, todo sentimiento de desilusión y desencanto por la realidad incómoda a la que se puede estar expuesto.Es una narración muy sensible y reflexiva.

Critica: