°CUERPO Y ESPACIO°

Sexo en agonía a punto de sacrificar
almas rotas en la amarga pasión de soledad
sin saber qué es lo que dolía.

Al tiraje de un constante dolor
donde perecía el cansancio
y las altas olas del mar se escuchaban entre gritos necios.

Sobre los hombros aturdía pesadez
y en las mandíbulas un rubor que hacía paso a la sangre
entre las venas que explotaban al vivir.

Con el viento arrastrando desdichas a las nubes
llenas de caos y crisis
expulsando cada locura en el cuerpo de los menos débiles.

Manos locas en el cuerpo cuerdo
sin precedentes de haber sufrido
por la ternura con que acariciaba lentamente su cabello y espalda.

Flores de invierno, vueltas pedazos con poesía
y visiones de la vida entre lo bello
y lo amargo causando heridas consagradas.

A la altura de los hombres necios
con cadenas a punto de romperse
emanando hedor en las nubes blancas,
– todo está perdido, adiós a la vida –.