La rosa con dueño

La Rosa con dueño

En aquel jardín escogería una rosa, una rosa como ninguna otra
De tantas rosas una sobresalía aquella era la rosa prohibida
La rosa con dueño, La rosa protegida
En aquel jardín bajo las miradas de las otras, ella envejecía.

Esa rosa con dueño, esa rosa protegida
Con ella manteníamos una mirada fija, desde que florecía ya tenía protector
Eso no impedirá que yo la quisiera, de su clase muchas pero como ella no hay ninguna
A ella la cuidan otras rosas con espinas junto a su dueño de noche y de día
Por esta rosa vivo, por esta rosa muero, pero con su dueño yo siempre pierdo