Nació, porque tú le diste vida.
Vivió, porque tuvo el alimento de tus labios.
Murió..., porque la vida que le diste,
se la quitaste, no sé por qué, ni cuando.

- ¡Ven ! que quiero que lo veas derribado.
¡ Miíralo !, quieto, inerte,
como un barco en la mar varado,
como un sol consumido en el ocaso.

Mira su brillo caído,
caído para siempre y apagado.

Dejó de ser guía y faro,
para ser una giralda
caída por el barro,
un dolmen sepultado,
sepulcro vacío
de un cadáver levantado.

A nadie importó su muerte,
ni si quedó por los suelos, o enterrado.

-¡ Ven tú !, si tienes fuerzas, a enterrarlo.
Yo no quiero sepultarlo,
aunque tenga,
para recordarlo,
que tener siempre presente,
el monolito de su cadáver
levantado.

Comentarios & Opiniones

Japi

Wow, tremenda obra, profunda que llega al alma, super recitable, no puedo describirlo, es mágica, me encanta.
Me recordó a una obra que decía así, -y el cadáver ahí, siguió muriendo,-

Critica: 
Silvia

Inmensa y triste ,llega al corazón.
Juan Antonio genio ! Besos feliz día!

Critica: 
Xio

Divina inspiración mi querido andaluz, fuerte, como con rabia...¡Ven tu!, si tienes fuerzas, a enterrarlo...estupenda obra, un placer la visita, recibe mi cariño hasta Andalucía, feliz tarde noche para ti, abrazos Juan.

Critica: 
Juan Antonio Conde Castro

Mis queridos poetas amigos: son halagos su comentarios que me hacen estremecer de gozo. Me congrstula saber que llego hasta las más íntimas fibras de su sentir. Con mi agradecimiento reciban cordiales saludos y abrazos. Pasen feliz tarde-noche!

Critica: