MARCHA PEREGRINA
poema de mayita
Mi vida es una montaña
Que se levanta imponente,
Por la que voy caminando
Paso a paso, lentamente.
La cúspide blanquecina
Cada vez veo más lejos,
Y cuando suba hasta ella,
Para entonces seré viejo.
En mi marcha peregrina
Con suspiros exhalados,
Blancas perlas matutinas
De mis ojos han saltado.
Devolverme a veces pienso
Como en éxodo alocado,
Y aunque desande mis pasos
Terminaré más cansado.