Amigo

poema de Jose O

Amigo,
necesito tu franca presencia
en esta hora aciaga
donde me hallo suspendido,
atravesado por la vaciedad,
con el aire atado
al profundo pozo de mi herida.

Amigo,
recoge mi alma en trozos,
tiende tu mano,
permite recostar mi cuerpo
sobre tu pecho rasgado.

Un minuto sin prisa
de tu mirada atenta
sobre mi rostro lacerado
para alimentar mi espíritu
que sufre esperanza,
para sosegar a aquellos
que de mi mano yacen
tendidos en llagas.