La rebelión de las canas

La rebelión de las canas

La vejez o edad senil, sinónimo de canas del anciano o pensionado
De trabajos y sudores, de sus arduas labores recordado
Fuerzas inquebrantables del ayer, hoy de caminar y andares lentos y pausados
De ciencias y saberes como un laboratorio, hoy lo tildan de anticuado
De enseñanzas e inteligencias plasmado, de sus conversaciones acallado
De historias y de letras recordado, hoy del olvido discriminado
Llegar a la vejez, de insultos indeseables, de reproches maltratado
Edad madura, llena de fragilidad sin resistencias, los riesgos son demasiados

Dicen los gobiernos, que entienden, que aman y quieren a los mayores
Los sacrifican con el rigor del prolongado aislamiento, como si fueran sus protectores
Restringen su movilidad y los enclaustran, creyéndose sus nobles salvadores
Les impiden salir a tomar el sol y ver de la mañana, sus hermosos esplendores
Hacen de sus lúgubres aposentos, horribles pesadillas de soñadores
Los aíslan como si fueran leprosos, con celdas de barrotes amenazadores
Nadie escucha sus gritos, ni secan sus lágrimas, sin eco de sus clamores
Dicen que les van a llegar ayudas y con migajas, calman por instantes sus dolores
O los mata la pandemia o el encierro de la cuarentena, de meses y días aterradores
Creen que con leyes los protegen, pero lo que son, son gobiernos de sus libertades usurpadores

El adulto mayor, dejó un enorme legado escrito en los murales de la historia
Pero rápidamente fue olvidado e insultado, sin tener en cuenta su trayectoria
Menosprecian sus canas y arrugas, con expresiones mortificantes de insinuaciones mortuorias
Desdeñados y añejos, jorobados de anécdotas, que ya no sirven ni para envoltorio
Edad dorada y hermosa, vejestorio anticuario, que solo sirve de vela en un velorio

La pandemia y los gobiernos cercenaron de un solo tajo sus capacidades mentales
Los tienen confinados, amenazándolos con llevarlos a los asilos y los abandonados hospitales
Los miedos y el caos acrecientan sus enfermedades, aferrándose a sus creencias espirituales
Sepultaron sus títulos y diplomas y acabaron con aquellos amores fraternos y sentimentales
Sus pasos se volvieron interminables, que los azotan y martirizan, leyes de políticas criminales

La vejez y la rebelión de las canas, que lleve al acabose de la discriminación
Su vulnerabilidad está en riesgo, la depresión y la soledad de llantos de desesperación
Claman por sus libertades, la salud es de ellos, del cuidado y su obligación
No los incapaciten y los releguen antes de tiempo, es el grito de su declaración

“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga mayo 31-2020