En la oscurridad

poema de wil cash

recurrimos a los Dioses en lo momentos de desesperación, en la impotencia, en la agonía.
mamá esta recostada sobre una camilla en la oscura habitación, dormida, inconsciente, creo que aun en sus sueños siente dolor, los doctores abren y cierran la puerta, ninguno dice nada, ninguno tiene alma, las pequeñas lucecitas de los instrumentos médicos brillan en la oscuridad, flotan como diminutas luciérnagas rojas, amarillas y verdes en posición adyacente e inmóvil, por entre la rendija de debajo de la puerta se escabullen sombras de pies y sonidos de pasos, un hombre llora, una mujer estornuda, solicitan asistencia pediátrica urgente en el segundo piso, son las dos de la mañana y muerte no usa reloj