SOPITA DE LETRAS

SOPITA DE LETRAS
No cabe duda, que las abuelitas son sabias y tienen remedios para todo mal, desde un simple resfrío hasta heridas del corazón... No existía malestar que la abuela no sanara con sus menjurjes y desde luego, todos los miembros de la familia, recurríamos a ella en busca de una cura para la enfermedad en turno.
-Para la gripe un caldito de pollo y ungüento en el pecho, nada más efectivo ¡Ah! y un beso en la frente- decía mi abuelita
Una noche, triste y abatida por la ruptura de una relación, miraba hacia la nada, en absoluto silencio a través del ventanal, serían alrededor de las 2 am. todos dormían en casa, o al menos eso pensaba... así que aproveché para dar rienda suelta a mi dolor, cuya expresión se había traducido en amargo llanto, cuando de pronto di un salto que casi me ponía en contacto con el techo, al sentir la mano de la abuela...
-¡Abuela! por Dios, mujer, me matarás de un infarto... -dije, al tiempo que me llevaba una mano al pecho.
La abuela rio de buena gana y tomó asiento a mi lado
-Abue, deberías estar durmiendo, estarás cansada -dije con tono de preocupación
Ella rio nuevamente y con esa voz característica, mezcla de amor, dulzura y firmeza, dijo:
-Hijita, nada es lo suficientemente grave como para no superarlo, esto también pasará... nada que una sopita no solucione amor -mencionó tomando mis manos en las suyas.
Yo la miré extrañada y le dije - abue, no dudo del poder curativo de tus sopas, pero esta vez... perdóname, pero esta vez, dudo que una sopita alivie mi dolor -concluí con un dejo de amargura.
Mi abuela se puso de pie, sonrío y desapareció del salón, quedé mirando de nuevo hacia la ventana y de pronto, la abuela había regresado, me extendió unas hojas en blanco y un hermoso bolígrafo metálico en tono rosa con plata, en un estuche del mismo color, la miré fijamente sin entender, y al notar mi turbación me dijo:
- ¡Sopita de letras, mi amor, sopita de letras...! Escríbelo todo, lo que duele, lo que atormenta, lo que te roba la paz y bébetelo a sorbos en cuanto la tinta sazone en letras lo que cocinas por dentro... -
Me quedé paralizada mientras sus palabras retumbaban en mi mente, "sopita de letras"...
-"Sopita de letras..." -repetí en voz alta con la mirada en el papel y el bolígrafo- Hay abue...- sonreí y... comencé a escribir...
Gema Sánchez
Comentarios & Opiniones
Gema,que precioso,recuerdo! me encantó saludos.
Hay que lindas memorias, las abuelitas,que magia han tenido siempre, quien no se ha sentido protegido de todo mal cuando la abuelita hace la señal de la cruz y nos da uno de esos...cocimientos..un placer de lectura, saludos cordiales.
César Carulla muchas gracias por su gentil comentario, un honor recibir sus bellas palabras
shutsz me complace que sea de su agrado, muchas gracias.
Xio es usted muy amable, gracias por su presencia y comentario.
Gema, un gran gusto es leer tan bello relato¡ Entrañable ser la abuelita digno tema a tomar, y tu pluma es maravilla¡ cordial abrazo¡
María del Rocío, muchas gracias por su bello comentario, me alegra que haya sido de su agrado. Saludos
Precioso Gema, realmente precioso tu relato que creo a todos nos ha pasado. Un gran gusto leerte. Saludos cordiales
mac1965 muchas gracias por su gentil comentario, un gran honor recibir sus palabras. Saludos