Melancolía

POEMA
MELANCOLÍA
EL ALMA
FEDERICO LANFRANCO.

He buscado un nuevo horizonte
en mis momentos de reposo
y solo veo
almas transparentes y diferentes
en corazones frágiles y débiles.

Nada veo, sólo veo aguas imaginarias infinitas
detrás de un mar de melancolía,
que anima mí sonrisa
Pero me deja perplejos, antes
los ojos
de un mundo ciego.

Que nos haces aperentar, que somos tan perfecto, pero sí quitamos la venda de nuestras pupilas
Sólo somos seres humanos viajando
a la velocidad del tiempo.

Sólo percibimos ecos de calma
y tranquilidad
En horas muertas, que mitiga
mí impaciencia
Si nos mantemos a un margen
del silencio sollozo
y dejamos de actuar, sólo por
instintos
Giramos como una esfera
incesante
sin perder el equilibrio.

Pensar ante de hablar y actuar
después de ser irracional
Es conocer la verdad y la humildad y ser honesto.

A través un horizonte sin fronteras
He buscado mí respuesta
a través de un cuarto menguante
de la luna
He hallado amigos, dentro
de un mundo de tinieblas
He buscado vida en los pétalos
pálidos y marchitados
Que no se pierdan las esperanzas
en los sueños que anhelamos.

Que al contemplar la frescura
de la mañana
Una bola de cristal y su predicción astral
Puedas ver a Cupido, cuándo flecha los corazones sin destino
! siempre dibuja el alma !
Pero en el triste final de
la batalla
sólo lágrimas ruedan por las mejillas.

Somos seres humanos difíciles
de rendirnos
Siempre miramos más allá de un cristal de vidrio
y nos adentramos, sólo para mirar
el futuro
Nos miramos en un espejo
sin sentidos
buscando los besos, que perdimos en el pasado.

Hoy cuelgan de otros labios
aquellos besos que eran tan mio
Antes estaban en mis manos
ahora están tan lejos y tan frío
Ahora se van por doquier,
vuelan como besos errantes
sin conocer de la piel.

Felicidad eterna detrás de una
nube negra
Alma desamparada buscando de una sonrisa lozana
Sobrevivientes de cáncer, detrás
de una esperanza
Planeta con vida, queriendo ser hallado
Seres humanos errados y perpetuados, buscando cariño y amor
En un mundo sin conciencia.

Derecho Reservado
FEDERICO LANFRANCO.