El final de la vereda

Débil soplo, un desaliento
Una estrella tan fugaz
Que se apaga con el viento
Y marchita en el voraz
Implacable son del tiempo

Un destello incandescente
Palpitado en la tiniebla
Que ilumina brevemente
Y se esconde entre la niebla

Breve viaje hacia la nada,
Al final de la vereda
Viaja el alma perdonada
Al lugar donde la esperan

El silencio interminable
De la noche más oscura ,
La quietud inquebrantable
De la inmóvil sepultura