los años

zurcir lo absurdo y lo burdo,
eso es lo mío.
poner mal las teselas
a propósito, sin propósito.

persigo lo ambiguo del mundo
y hay de ello en todo, a montones.
aglutinó imágenes cavernosas,
con sus estalactitas y sus afluentes incluidos.

construyo templos de adobe,
mansiones
malsanas y escalofriantes.

maldiciones y groserías que
pongo junto a las rosas y el rocío.

no doy consejos ni malas noticias
y siempre miró al mundo
cómo a una página en blanco.
nunca supe llenarlas
ni quiero aprender a hacerlo.
solo un idiota pondría palabras a lo indescriptible.

once años de depresión, y contando.
la terapia ayuda, la cerveza no,
prefiero la segunda.

se me cae el pelo y me crece la panza,
me crecen las ideas y se me caen los recuerdos, algunos caen como piedras
otros, como pétalos.

a veces la desdicha me lleva a las bibliotecas,
cuando tengo un golpe de suerte terminó en un bar.
hablando con alguna mujer, que quiere irse a la cama conmigo,
pero estoy demasiado ocupado pensando en la biblioteca y no le presto atención.

antes confiaba más en los signos hoy prefiero los simbolos.

me cambiaron los años y yo no cambiaría esos cambios, si cambiaría algo por más años.