Hojas sueltas

poema de Atlayxes

No entiendo que hago aquí, mintiéndome, resignandome con amistad si en el fondo solo quiero tenerte a solas, para mí.
Para nadie más.
creí ser valiente y me consideraba suficiente, hasta que volviste tú con tu carro plateado esperando fuera de mi trabajo, sin rosas ni chocolates. Solo tu sonrisa enorme de par en par.

En los pasillos oscuros que se forman de media noche en ese lugar que tú y yo conocemos muy bien, me robaste cuatro largos besos y un agarrón por aquí, y otro por allá.
¡No sé decirte que pares! No puedo pedirte que detengas algo que no quiero que llegue a su final.
¿Somos amigos? no amantes, eso seguro. Pero los amigos no se acarician por las noches ni intercambian miradas lascivas entre hombro y hombro, a espaldas de la gente. Ni se roban besos con sonrisas coquetas,
y menos, seguro, te miran como te miro yo a ti. Cómo nadie más había mirado jamás.
Y por la forma en la que te cuido el dormir, en tu espalda trazando constelaciones y nuevas estrellas con mi dedo índice, me descubro sabiendo que no te puedo dejar ir.
¿Serán quizá tus dedos traviesos que descubren caminos nuevos entre mi blusa y mi sostén, y me tocan sintiéndome desfallecer? intento no hacerlo, pero te comparo. No quiero que nadie más me toque del modo en el que lo haces tú.
O tal vez tu mirada tan fría y detonante, tan autoritaria... y mil sinónimos más. Mis manos recorren mis piernas inconscientes pero las dejo quietas allí, ¿qué no entienden qué no eres tú?

Hoy, me rompiste el corazón. Un poquito más de lo normal, y es solo qué, sabiendo tú la respuesta, solo hiciste la pregunta para humillarme más.
¿Aún te gusto?
Mi pulso se acelera y siento las vibraciones del corazón. Me dan taquicardias y mi mirada se nubla, no tengo otro modo de describirle!
claro que sí.
Tú me sonríes y me das un beso en la frente. Es como un beso de resignación.
Cada día me siento más jodida por ti y lo peor es que hoy aceptaré volverte a ver. No puedo alejarme de ti, eres vacío y yo caída.
claro que sí, pero amigos no.
Hoy me dejas un poco más rota.

Comentarios & Opiniones

Aldebarán

Dependencia en la desesperanza de no sentir soledad... Es bonito llenarte de ti para amar sin esperar que te den migajas. Excelente reflexión. Un abrazo

Critica: