4 meses

Si él supiera cuánto lo amé,
¿cambiaría algo?
Si hubiese sentido mi amor
como la lluvia en su piel,
¿se hubiera quedado?

Aquella noche infinita,
donde mi voz se extinguió,
donde solo quedó el eco
de lo que nunca fue.
Silencio.
Silencio.
Silencio.
Y aún recordar
me desgarra la voz.

Si él tuviera la certeza,
¿se hubiese quedado?
Pero esa noche morí.
Morí.
Morí.
Y nada quedó de mí.

Si él supiera que no quería pelear,
que no quería hablar,
que solo anhelaba su amor
deslizándose sobre mí
como la lluvia en mi rostro.

Si él supiera que su partida
no solo me dejó vacía,
sino que mató algo
demasiado hondo para revivir.

Si él supiera que no quiero su regreso,
pero tampoco su sombra,
que no quiero hacer de él un villano,
pero las balas,
las balas son balas,
y él sabía que pueden matar.

Que no se juega con promesas rotas.
Que no se juega a construir un hogar
sobre escombros.
Que no se regalan esperanzas vacías
a alguien como yo.

Él lo sabía.
Él lo sabía.
Él lo sabía.