LA ROSA DEL AMOR.

Una pulsión que amenazó con desequilibrar su mundo. Su jardín era un rápido correcaminos, me podía saciar de ese entero placer sobre sus ojos mirando el suelo y pensando en la imagen que tenía a su lado.
Como si no hubiese imaginado que la luz de la verdad se sentaría a enloquecer su alma de a pocos.
El cubo Rubik por fin se estaba armando, los colores se iban alineando y desbordamos pasiones sin siquiera tocarnos un vello, fue tan Divino que los espíritus tuvieron que observar la creación de un nuevo imperio.
Ladrillo por ladrillo te empezaste a hacer hogar en el corazón del espíritu y de pronto el creador se sentó a su cuesta para maravillarse de su creación. El cielo se encontraba despejado para entonces, pero también eran grises en su jardín del pensamiento.
Tu majestuosa presencia me llevo de nuevo al padre y todo se alineó ese día cuando mis besos fueron tan solo en el pensamiento, tan solo la idea. Tus brazos me recogieron vertiginosos de poderme amar con la desnudez de la mirada. Sus ojos se clavaron sobre el suelo de tal manera que mi mirada lo impactaba cuando se encontraba con la mía, entonces evitaba chocar con mi mundo.
Entrelazaron todo en un gráfico de estadística, en el fondo del submarino había mucho amor por derrochar, pero el tiempo era fiel testigo de lo cruel de sus besos. Mente y cuerpo ya unidos en revolución para disipar la chispa del amor creándose en oscuridad.
¿Qué es el amor sin el fuego?
¿Qué es el amor sin miedos?
¿Qué es de los que aman sin saber adónde van a parar?
Es suficiente tus miradas alcoholizadas de mi esencia al pasar, el alivio de tu corazón es un latido doble para el alma mía.
Te bañas de mi piel, desnudo tu recorrido juntos en ese espacio que habitan los deseos del futuro. Absorbes mi rara esencia hacia la tuya y el volcán empieza a consumirse en llamas.
Una sonrisa, tu fresco amor recorriéndome hasta lo más hondo y tu miel donde me provocaste el fuego, desde donde vienen los pétalos duraderos de la rosa del amor. Tu melancolía se enreda en el paraíso de colores de tus labios.