Inefables ojos ( prosa de amor y pasión)

Inefables ojos y luminiscencia,
verdes que evocan grata reverencia
en el peregrino que los observó,
penetrante mirar y de gran elocuencia
a su víctima con su luz cautivó.

(A veces es mejor el paso cabizbajo
y la mirada perdida que nada vió.)

En un arrebato de vesánica locura,
en el vademécum de inflamada alma,
encontré las tres primeras palabras.

-¡ Yo te amo !- mi cuerpo se alzó,
-¡Yo te amo! ,¡y amo tus ojos!- el ánima habló,
impetuosa reacción seguido de un arrepentimiento
sin poder razonar ese esporádico sentimiento;
decenas de rostros atónitos sonriendo miraron,
y mis mejillas ante ellos... se ruborizaron.

-¡ Qué culpa tengo yo de este escándalo!
¡mi corazón no se ciñe a mi razón!- pensé yo

Al cerrarse las puertas y desaparecer en el horizonte
todo la epifanía de óculos vivida..acabó.

(Historia de los dos verdes ojos en el vagón del tren en el metro de Madrid.)

Autor : Daniel Plans Dimanuel
17/05/2016, ESPAÑA