Condenados
En épocas diferentes la aparición,
en entornos diferentes la existencia,
en lenguajes diferentes la comunicación
y en forma diferente la apariencia.
Un objetivo común en dos seres:
Vivir juntos siempre,
procurándose y cuidándose
de enero a diciembre.
Buscando en cada entorno a ese ser
y no encontrarse hasta que ya te canses de en él creer;
por arte de magia aparece
y tu túnel oscuro se resplandece,
se aclara tu vista y tu rostro sonríe,
tu vida se alegra en cuanto a ese ser maravilloso mire.
Pareciera una atadura
que sin querer te envuelve
y estando inmerso en la locura,
irónicamente, la vida te devuelve.
Tus alas permanecerán abiertas
porque la confianza hacia tu ideal
quitará candados de todas esas puertas
que antes no se te dejaban de cerrar.
Mirarás al futuro sin miedo
porque sabes que la soledad ya no estará contigo,
conquistarás en el presente con esmero
porque hasta el pasado se convertirá en tu amigo.
Intentarás escapar, no lo lograrás,
querrás por siempre alejarte,
sin embargo a tu ideal nunca olvidarás
y sólo podrás en instantes apartarte.
Cada momento a su lado tendrá algo bueno,
cada beso dado se convertirá en un lapso ameno,
no podrás quejarte del enamoramiento
porque cuando te ha atado, ya firmaste el juramento.
Comprende que habrá diferencias,
que seguro te confundirán,
no desistas, son sabias inclemencias
que más los unirán.
Las metas serán mutuas,
los logros te harán grande,
quizás por distintas rutas
pero siempre todo tendrá un colectivo avance.
Las horas te parecerán segundos a su lado,
los momentos anhelados te tendrán entusiasmado
y cada instante a su lado vivirás más enamorado.