la reminiscencia de mis días

Hubo hace unos pocos, algunos o muchos años; un amor que atormento mi alma un ser que apareció de la nada y poco a poco como daga, se clavó entre mis entrañas.
Fue un ser idílico, un ser de otro mundo, que como una polvareda dejo huellas en toda mi casa, derrumbo mis paredes y acabo con mis muros y tras un beso robado se adueñó de mi mundo.
Aun no comprendo porque me escogió a mi entre tanta gente, que vio en mi alma que quiso devorarla, como un demonio penetro a mi santuario y se robó toda mi calma.
Que días de gloria pase a su lado, no sabía el día ni mucho menos la fecha del calendario, las horas eran cómplices de lo que pasaba en la alcoba de esos amaneceres que se volvían poco a poco sombras, ni el pan ni el vino saciaban mi cuerpo solo sus besos y ese torso desnudo podían nutrir mi espectro.
Que pasado tan intenso, que placer tan pecaminoso, era vivir en el infierno atada a su cintura gimiendo de goce y agonía porque el tiempo no era amigo era verdugo y de sobra sabía que el final se acercaba que la inmundicia del mundo acabaría con el cuento de hadas.
El recuerdo de esos días, aun cala en mi espalda y una bocanada fría le clava cuchillos a mi alma, que experiencia tan mas grata fue dormir con el diablo en mi propia cama.
Corina Herrera. Ch <3