Ven a verme

Ven a verme cuando quieras,
yo sabré reconocerte;
estarás en mi memoria
hasta el día de mi muerte.

perdonada por el tiempo
o pisoteada por la edad
aunque no te reconozcan
yo he de verte y recordar.

que te alzaste como fuente
de mis grandes obsesiones
y perderte, entre todos,
fue el mayor de mis temores.

que no estuve preparado
para ver que te me ibas
pues había descubierto
que ya mucho te quería.

ven a verme cuando quieras
algo habrá de sorprenderte,
que a pesar de tanto tiempo
no he dejado de quererte.

Carlos Z.