XVII

poema de C.Cruzalegui

Aun no te he preguntado eso,
aunque ya se tu respuesta
tendre que darme media vuelta y marcharme muy triste.
Es que,
quien puede seguir de pie?
tengo el lomo quebrantado
y mi voz fue alguna vez un dulce manjar
lo que toco se madura, cae y se va
y si lo retengo, se pudre, se marchita.

Dame esa respuesta que yo quiero oír
esa mentira negra que lava mi alma
ese sueno tibio de una o dos horas
ese pan vulgar que hasta un mendigo rechaza.

O tal vez
una mañana sin maldiciones
un ataque de amnesia en cada pelo suyo
dame esa muerte rapida
en el placentero sinfín de tus torturas.

C.Cruzalegui