a un viejo poeta

La pluma se ha opacado
con el humo de los años;
y yasen los reglones
desnudos sin voses,
levitando en nostalgia;
como alamos en invierno.

¡Cuanto tenblor en sus manos!
¡cuanta angustia enmascarada
en las empequecidas letras!
parecen vorases termitas
que roen el rechazo al olvido
en tardes del solitario poeta.

Sus saludos se hermanan de brisas,
mientras busca en cada rostro que pasa
visos de viejas amistades;las ansias
de chalrar, de reir,de leer,de escrbir;
se esfuman como salmos recitados
en el estruendo de la cascada callejera.

El viejo poeta
por la ventana entre abierta
anochese vestido de saludos;
queriendo pintar de sol el crepusculo,
queriendo pintar de verde a sus viejos amigos,
para invitarlos a su ultima tertulia.