el primero.

Te veo llegar
Te siento al andar
Mis arrugas muestran demás
Que tú no vas a tardar

He cumplido mis metas
He cerrado mis cuentas
He disfrutado mi estadía
En este resort de la vida

Qué más puedo pedir
Si he podido sentir
El mar entre mis pies descalzos
estando ella entre mis brazos

Que más puede ocurrir
Si la he visto partir
Si la he visto cerrar
Sus ojos y zarpar
A donde pronto voy a llegar

Me voy alistando ya
Para zapar en un viaje
Que sin escalas ni equipaje
Tengo que tomar.

Mis nietos y nietas
Se acercan a la cama
Y en silencio exclaman
Sus adioses y hastaluegos.

Mis amigos de la infancia
Aquellos que nunca fallan.
Me abrazan en la estancia
Y me susurrando al oído
¨Cuídate, mi querido amigo¨

Mis hijos e hijas
Se acercan a mi cara
Y con sus lágrimas me reclaman
¨padre no se vaya¨.

Cierro los ojos y la puedo oler
Y el sentir sus labios me estremecen
Siento sus manos envolver.
Mi viejo cuerpo que ya se desvanece.

Me propongo a esperar
A el avión de la muerte
Cuando de repente

Siento algo en mi corazón
Y al instante me doy cuenta
Que el avión se acerca
Y después de un peñiscon
Pierdo la noción
Y un pitido anuncia
La partida de este señor.​