Miedo a la alegría

Te dejé como un navío a la deriva,
te mostré la indiferencia del vacío,
Cavé un hueco en mi memoria,
para cubrirlo con el orgullo de un capitán herido.

Vivirás con este recuerdo amargo,
niña de algodón,
dulce como el sol a mediodía,
delicada como una flor amarilla,
sedienta de sabiduría,
que triste fue ser el verdugo
de este árbol que crecía,
el tronco abierto sangra la melancolía.

Que estos brazos nuevos te abracen,
como hoy te abrazaría,
que estos besos te compensen
el amor que te debía,
el amor que merecías..
el que guardé egoísta,
con miedo a la alegría.