CANTO DEL EMIGRANTE

poema de AMAREC

Apreciados señores:
préstenme atención,
solicito sus favores,
¡ por compasión !

Bajo el sol ardiente
el interminable camino
Serpentea Indolente
A través del destino.

Durante Muchas lunas
me he desplazado
entre desérticas dunas;
por el bosque y el prado.

Padecí dificultades;
atravesé naciones;
sufrí penalidades;
Sorteė persecuciones.

Nada me hizo desistir.
Refugiado en la Fe,
conseguí sobrevivir,
sólo Dios sabe por qué.

¿ Y qué ve mi retina ?
La policía, el encierro,
la valla, la concertina,
la cacería y el destierro.

La Fe se tambalea,
la Razón se resiente,
la paciencia se pelea
contra la ira naciente.

Señores, ¡ por favor !,
¡ Sean ustedes coherentes !
Trátenme com Amor,
muéstrense inteligentes.

Sí, invadí la frontera,
no tuve otra opción.
Si tuve que irme "fuera"
fue por pura obligación.

¿ Y qué he encontrado ?
El monstruo del que huía,
cruelmente multiplicado
por el odio y la codicia.

Tristeza, pena, desencanto.
No obstante, señores,
seguiremos avanzando
a través de los dolores.

Ningún obstáculo me detendrá.
Sepan que soy hechicero.
Además de emigrante "ilegal",
Soy chamán Granicero.

Huyo de la bestialidad
buscando Encontrar
Mayor Humanidad
Allá en Ultramar.

No somos "animales",
aunque lo parezcamos.
Somos seres racionales,
incluso si lo ignoramos.

Por Favor:
¡ Ayúdenme !,
Muéstrenme Amor,
¡ Socórranme !