Un largo tiempo sin pensar.

De un momento a otro, como viajar en avión y tocar tierra sin antes aterrizar, como ver al sol y no te lastime porque a un parpado la luna lo cambio, ir caminando por el viento y resbalar en seco, así de increíble es la ocasión que se presta el día que de un momento a otro se pierde lo que nunca has tenido.
Si es confuso para el corazón ciego, que tan claro puede ser ver si no crees lo que tienes dentro de ti, que te quema sin dejar huella que puedas contar y coleccionar, que te lleva de la mano y sin un dedo tocar, lo que un sueño te hace encontrar y que en la vida solo lo podrás pensar.
Quien aprecia lo que habla y piensa lo que dice, es quien no tiene lugar donde acomodar su sociedad paralela, es quien a donde sea que vaya no va a estar si no a perder. Queriendo llegar a pintar un color que no me gusta, aun no entiendo si apenas determinándolo, algo podre lograr, no quiero empezar.
Mis manos hablan más que mi mente y mi boca repite el lenguaje de la punta de mi cuerpo, se extiende por la decisión de moverme y contar cuando solo una elección se transforma en dos.
Me estorba el nudo patético que no puedo deshacer y la sombra que la música deja en mi me provoca presión constante en el alma, quizá esto si lo entiendas, quizá sin verlo lo creas.. que lo único que no me confunde es que…. Si no llego a ti es porque me perdí en mí.