Rescate de una dama imaginada por Pound.

poema de Erasmo

¡Oh Francesca!,
yo te conocí en la liturgia
de los besos inclinados
ante el altar del poema.

Te confundí entonces
con la luz encandilante,
de lo original,
primigenio elemento,
tu voz.

Pero eras más que eso,
eras también el cuerpo
y el sonido de las caracolas
de una playa templada.

Eras clavicordio
de una sinfonía de Mozart,
o sus clarinetes de melancolía.

Y fue fugaz aquello,
pero a la vez eterno,
como lo que guardo en mi memoria,
bajo la sentencia de los astros.

Comentarios & Opiniones

Xio

Que preciosos recuerdos quedaron en el alma, cuando el amor toca; toca... belleza de obra, abrazos cordiales querido poeta, feliz día hasta Argentina.

Critica: 
La Dama Azul

Caballero, encuentro profundos, musicales y románticos vuestros versares. Un gusto de lectura.

Reciba cordiales saludos.

Critica: 
La Dama Azul

"yo te conocí en la liturgia
de los besos inclinados
ante el altar del poema."

Critica: