La grandeza

Es grande, quien sabe dársela por ganada a un mal perdedor.

Es grande, quien calla para que se jacte otra persona a sus espaldas, y sin embargo, no hace reclamos beligerantes o conflictivos.

Es grande, quien elogia las mínimas cualidades o destrezas de otros; mientras se priva de presumir las propias cualidades superiores, que ostente ante esa otra persona.

Es grande, quien convence con una efímera afirmación espontánea, y no con un extenso discurso de varia horas.

Es grande, quien vive en medio de los pobres, y aun así, comparte desinteresadamente lo poco que tiene.

Es grande, quien acepta una derrota justa; pero es más grande, quien no refuta una derrota injusta.

Es grande, quien renuncia a lo fácil y des complicado por preferir lo más complejo y exhaustivo.

Es grande, quien vive satisfecho enfrentando un presente y destino incómodo o irreversible.

Es grande, quien también aprende a darle la razón a alguien menos sabio.

Es grande, quien admira más su ignorancia que su extrema sabiduría.

Es grande, quien convive tranquilo con su imperfección; más que con su perfeccionismo utópico.

Es grande, quien agradece por sus problemas y adversidades que le proporciona la vida para descubrirse y formarse plenamente.