Debí haberlo sabido

Debí haberlo sabido,
Que al irte de mi lado,
Mi corazón te extrañaría.
Y mi mente confinaría tu amor,
Durando más de mil años,
Construyendo mis sueños,
Cortando mis alas y agobiando mis fantasías.

No es triste tu adiós, si no tu desamor.
No es más triste mi angustia,
Sino que sin ti ya no podía.
No es tan simple tu ausencia,
Sino que mi amor te perseguiría.

Y sin embargo mis sueños se romperían,
Como el cristal en su caída.
Para recoger los recuerdos migados,
Que al beber por ti, se destruían,
Y me escondí detrás de mis penas,
Con heridas que no se sanarían.
Esperando en la esquina, para ver si tú volvías.