A ti que crees estar a salvo

No estás tan lejos
de perder la cabeza
y llenar una casa con gatos
y perros callejeros
y de amar a los muertos
y odiar a los vivos.

No estás tan lejos
de olvidar tu nombre
y el rostro de tus familiares
y de pegar voces por la calle
aclamando a tu dios
que se apiade de las almas
de los pecadores.

No estás tan lejos
de acumular basura
y compartir cama
con las cucarachas
haciendo de tu almohada
las denuncias recibidas
por parte de tus vecinos.

No estás tan lejos
de buscar papel de plata
y recorrer las aceras
con dos dientes
decorando tu sonrisa
con la mano abierta
añorando tu dosis...

Dime tú
que estás entre cuatro paredes
abrazando el frío
si crees estar a salvo,
dime tú
que te abrigas en la oscuridad
si crees que esta
no te acabará devorando,
dime quien esquiva la locura
cuando esta está en cada esquina
mostrando sus fauces
a cada ser que se atreve
a no comprender
la soledad...