Carta para mí
poema de Abriles
Querida yo:
Hoy fuiste por mí.
Tal vez no tenía ganas, tal vez me sentía frágil, pero igual me acompañé.
No importa cuánto hice, no importa cómo me vi.
Estuve.
Me elegí.
Y eso vale más que mil logros.
Porque estoy aprendiendo a ser abrigo para mí misma.
Poquito a poco.
Como quien riega una planta sin saber si va a florecer.
Pero riega igual, porque lo merece.
Ya no exijo promesas
Ni que entienda todo
Solo presencia





