CON LAS MANOS VACÍAS

Se espesa la sangre
del recuerdo
y me agarro a coscachos
en la escuela.
Me voy
un domingo para el cerro
siguiendo
un amor
de primavera.
Y he bajado
y he vuelto solo ayer
con la cola
metida entre las piernas,
más cansado,
triste,
más oscuro,
con las manos
vacías y más viejas.