Herejía
poema de Mr. Caulfield
Matemos el silencio
en el momento del éxodo.
¡Gritemos y desgarremos!,
un segundo de catarsis
solos entre el tumulto:
trémulo .
Así ha de ser
segundo tras secundario.
Clamemos a voz cerrada:
Únicos, Dioses Todopoderosos
artífices del gran estallido,
neonatos de muerte y vida
dotados de cuanto imaginado.
¡Opaquemos su milagro!
Cuando la mudez haya hablado
¡ahí! Se habrá logrado:
la lluvia se derramará
-lagrimas divinas -
ante el nuevo milagro.
Silencio: la muerte llego a los cielos.
Comentarios & Opiniones
HERMOSA OBRA POETA ...BELLAS PALABRAS QUE SALEN DEL ALMA,,,CADA LINEA ES UN SENTIMIENTO SINCERO....DIOS TE BENDIGA...TODAS LAS ESTRELLAS ...TE INVITO A PASAR POR MI MURO...!!!
Bastante interesante. Un grato placee de lectura. Adelante con sus letras!