JACTACIOSA FORMA DEL DESTINO

poema de mendigo

No sé yo cómo he permitido
que alguna jactanciosa parte de mí ser
lograra su destilada solución de lo impermitido,
tal vez fuera por el manotazo
que se suelta en mi espalda ,
y me lanza al camino,
al control de mis propios pasos
como si la furia del destino
fueran crónicas del irrespeto a mis impulsos.
...pareciera pues,
que un diablo a la fuerza de lo que es,
me aplastara el esternón y lamiera mis costillas
como un perro salvaje y pervertido,
pareciera ello... y otra vez es solo mi destino,
que peligrosamente inentendido
retrotrae en un déjà vu mis alteraciones
mis ojos, mis manos,
y mis hondos sentidos,
haciéndome roca que se estanca
en los sueños de otrora
a merced de la formas geológicas...
del pasado.
y uno piensa, que impide los soñado
y uno siente, que es el destino.