per algú especial (para alguien especial)
poema de Klaus Liebknetch
Pasaron cinco primaveras
desde que mi aliento se detuvo,
al ver en esa acera
grises perlas al desnudo,
que entre rizas varoniles
Se adueñaron de mis dias juveniles.
Aquella tarde de verano
en que comenzó esta historia
desconocía que en su mano
se hallaba la llave de mi euforia,
la cual sueño febril
Me inspira en este abril.
Fue aquel día fecundo
en que sentí por primera vez,
ese sentimiento profundo
de hormonal embriaguez
y fuertemente obnubilado
Llegue al paraiso soñado.
Esos "te quiero" inocentes,
y besos compartidos,
como cómplices adolescentes
en historia de bandidos
los preservare por siempre
de forma solemne.
Y aun que no terminara
como hubiera preferido
al tiempo quiero agradecerle
Por habernos unido.