Sólo de mis versos

Si no hubieras
aceptado,
Rosaura
de mi vida,
que amar
en la distancia
no es más que un
consuelo
para amores
imposibles,
(por más que
adornen éstos
de metros cortesanos y trovas
de Provenza)...

...yo no podría afirmar ahora
-como sin duda afirmo-
que sabías de sobra
que lo que buscaba
era a tus ojos,
a cada parte de tu cuerpo,
evocado por el mío
al desvestirme,
... cuando te escribía
cada verso que te he
escrito...

...; yo no podría afirmar
que todo esto
es prueba de que,
al creerte tú
que yo me contentaba
sólo con cantarte,
como desechaste el motivo
real de mi sueño,
(puede que no fuera
otro tu propósito),
perdimos la oportunidad
-la real-
de gozarnos más estrecho...

Pero dime:
¿acaso no sabías
-como lo sabe
cualquiera que ama-
que la finalidad
-la verdadera-
de los versos de amor,
bella Rosaura,
es amar de pleno?

Y si lo sabes,
como tampoco ignorarás
que la finalidad
del tiempo es consumir la vida,
ya te advierto
-según vengo de harto y cansado
en mi pelea-
que gozarás
sólo de mis versos,
y no de besos ni consuelos
de mi carne...

Sabes que te aprecia,
bien que sólo como amigo ya
(cosa no poca)...

Coliflorio de Salmienta.