Tomate
¡Quién lo creyera!
tres asuntos fortuitos me hacen hablar sobre ti:
un ejercicio de escritura, mi cambio de dieta, el miedo a la muerte
nunca imaginé escribir esto
Pensé en ti mientras caminé
tres punto nueve kilómetros
o cinco mil seiscientos pasos según mi reloj
tu piel
joven, compacta, roja, brillante
lista para ser cortada,
picada o macerada
tu redondez plena
como la tierra
autosuficiente
como la naturaleza
tu corona verde
como recuerdo de la planta de la que fuiste cortada
y de la cual todavía
conservas su fragancia
Antes,
cuando te comía,
te perdías entre la extravagancia
del condimento de comidas extranjeras
pizzas, hamburguesas, donas
o más locales
aborrajados, patacones, empanadas
Solo al renunciar a esto
logré sentir tu sabor intenso
tu autenticidad
el jugo azucarado de tu esencia
Tu concepción, tu evolución
y tu propósito me recuerdan
que la vida brota
de cosas muy sencillas.
Comentarios & Opiniones
Sócrates!!!! Qué poema tan canibalesco!!
Bueno, está bueno pero aayy!
Excelente diría yo!con humildad y respeto.me encantó! Felicitaciones saludo cordiales y beso.
¿Canibalesco? jaja. Gracias por tu comentario Celeste Alma.
Gracias por leer, Ángel.
Gracias, Silvia. Saludos para ti también.
Perfecto para reflexionar sobre lo que debemos renunciar para encontrar el sabor exquisitos de las cosas simples! Muy buen trabajo, feliz día
Jajajajajaja, oiga que es broma!
Ya sé que está describiendo al tomate, sólo yo hice una analogía con el cuerpo humano y por ello bromié con lo de 'canibalesco'
:-D