Poeta muerto de lengua mora
Tu eras la mujer que hablaba con la harina
La sevillana que más consumía insulina
Eras la señorita que enamoró
Al poeta muerto de lengua mora
La alérgica a los poemas de Espronceda
La más chula de las calles de cera
Y después un silencio
Que asustó a tu pretendiente
con cara de un feo presidente
Y después te puso un precio
Que aumento tu menosprecio
Te vi después del engaño del moro
Estabas sola fregando portales de oro
Haciendo amistades con repulsivos señores
Para alimentar al mestizo de una tal Dolores
Después de todo sigues siendo la que eras
La mujer más chula de las calles de cera
Y después un silencio
Que hizo al niño cumplir penitencia
Y después un silencio
Que hizo a la niña vencer a la tormenta
Tu vida escrita en instrucciones
Para aquellos que odian a los maricones
Tus libros los van a calcinar
Cuando estés a punto de esnifar
Después de tu andanza por todas las aceras
Sigues siendo la mujer más chula de las calles de cera
Comentarios & Opiniones
Genial retrato, genial escenario, un placer de lectura. Saludos!
Bravo, muy buen poema, me gustó mucho el estilo.
Saludos cordiales.