GENEROSIDAD: LA RENUNCIA DEL YO

Porque mi ser natural no lo acepta.
Se niega a tirar la esperanza en un rincón.
Porque después del temporal más aciago,
volvió en el horizonte a brillar el sol.

Te invito.
Dame la mano y seamos muchos
quienes formemos la ronda del mañana.
De ese mañana que nos encontrará más fuertes.

No dudes de que las cosas no son porque sí.
Las causas parecemos entenderlas todos.
Las consecuencias, nos han arrasado.
Acaso no es hora de actuar distinto?

Qué más hace falta para que el Hombre reaccione?
Ver la tumba a los pies del camino...
no es lo suficientemente poderoso
como para decir "ésto no es lo que merezco"?

Llénate de empatía.
La palabra más famosa y la de menos acción real.
Piensa a futuro.
Por los que recién empiezan la vida,
por los que vendrán.
No por ti, por los otros.

Esos seres sin culpa que pagarán tu desatino.
Se puede cambiar paulatinamente...
Poco a poco.
Dejar el egoísta "yo".
Acaso no aprendiste que solo no eres nada?

Somos seres sociables por excelencia.
Nuestros orígenes están en la comunidad misma.
Qué nos hizo aislarnos en una burbuja de mentira?
Siempre...SIEMPRE! vas a necesitar del otro.

No somos autosuficientes, realmente.
Nos hicieron creer que todo lo podemos.
Que nos llevamos el mundo puesto en los pies.
Mentira!

Desde que nos origina el vientre materno,
no nacemos solos ni para estar solos.
El cordón umbilical madre-hijo
sólo se corta en la carne misma.
Pero lo tendrás hacia diferentes cosas toda la vida!

Aprende a extender la mano.
Cuando tú lo precises,
entenderás, al fin, que no somos un "yo".
Entonces, la vida, será realmente un lugar mejor.

21/04/2020