Erase una vez
poema de Mary
Y así termina nuestro libro,
sin apenas comenzar,
solo “érase una vez”
pero ahora ya no más.
Al final la caperucita
sin su lobo se quedó,
el conejo sin Alicia,
el principito sin flor.
No es culpa de el destino,
el hilo rojo nos falló,
tantas cosas por decirnos
y en suspenso se quedó.
Tu yo yo siempre tan distintos,
diferentes tú y yo,
fue más sencillo el herirnos
que luchar por nuestro amor.
Comentarios & Opiniones
"Al final la caperucita
sin su lobo se quedó,"
Ayayay, eso sí sería muy triste, ya no habría el cuento que más me gusta desde niño. Algo se debe hacer para recuperar la fantasía más romántica. Me anoto para tal hazaña.
Buen abrazo.
Aquí de nuevo por "el lobo y caperucita", o de otro modo tendré que tirar mi disfraz...
Abrazo grande.
¿Y si al volver escribir
nos destrozamos el alma?
Mejor es contarle a Bella
que su bestia no la ama.
O quizás el si la ama,
pero no lo suficiente,
(eso es lo que murmuran
en el silencio los duendes)
Ah, Mary, Mary...
Qué bonita respuesta. Entonces nos anotamos...
Buen abrazo para no extraviarnos en el intento.
“érase una vez”
pero ahora ya no más.
Bellísima exclamación a la resignación,al amor propio y sobre todo a la poesía.
Me gustó mucho.
Éxitos siempre.
Gracias por su agradable comentario Karencita
Como una vela al final del frasco, como una libélula en pleno amanecer, triste, doloroso, precioso, hermoso, agridulce ser. Magistral trabajo, mi querido amigo. Recibe mi reconocimiento y mi admiración por tu obra presentada.