EL MAR

El mar que besa la arena
Con abrazo vigoroso,
Con su fuego sin reposo,
La deja de amores plena.
Con su energía la llena,
De caricias sin igual;
La arena luce triunfal
Con su amante apasionado,
Manteniéndose a su lado
De una manera especial.

La arena sirvió de lecho
A alguna que otra pasión,
Y fue cuna de un ciclón
Y de algún barco deshecho.
En ella descansó el pecho
Del náufrago más sediento,
Rio el niño de contento,
Y el ave voló feliz,
Y nos tuvo a ti y a mí,
Disfrutando algún momento.

Olas que vienen y van,
Asesinas y brutales,
Románticas; infernales...
Y qué marcadas están,
También de amores que dan,
Su vida en forma total,
Olor a pirata, a sal,
A muerte, a tormenta, a frío
A llanto, a escalofrío,
A náufrago, a temporal.

Amo a la naturaleza
Igual que a la vida mía,
Como adoro la poesía
En toda su gentileza.
Me admiro de la grandeza
Que tiene la Creación;
Y pienso sin dilación,
Que esta Obra es tan perfecta
Tan divina, tan abierta...
No tiene comparación.

Es abierta la Natura
Nunca nadie ha puesto un muro:
Donde comienza el futuro?
Quien hizo a una roca dura?
Quien al Mar con su bravura
Le dice: Detente ya!
Quien dirige desde acá,
De una estrella el titilar
Y a nuestra luna al pasar
Le dice; No alumbres más!