¿Contigo?

¿Contigo?, contigo aprendí a llorar,
a causa de mis caídas, me di cuenta de que existe aquello que bautizaron con el atributo de maldito dolor.

¿Y yo contigo que sería?,
me hacía una y mil veces esa extraña pregunta.
Cayeron esas noches de insomnio en las que nunca llegué a pensar.
Me traumatizaron aquellas palabras que quedaron selladas en mi alma
como tiza negra.

El alcohol es sólo un pequeño calmante de ese mal humor, o más bien, de esa maldita situación.
Me derrumbó el rechazo como una torre que de altura no tiene límite.

Y me pregunto :
¿Yo sin ti,qué sería ?.
Deja que escuche tus latidos,
a lo mejor ellos te pueden delatar,
a lo mejor tus ojos te pueden desmentir
y todo entonces quedaría plasmado como otra realidad.