Pluma

Bienvenida eres en mi eternidad
lapso suave de noche en soledad.
Diamantinos filos tu luz reviven
como silencios de la nieve virgen.

Yo llegué como pluma en el viento
el beso suave quedó en el recuerdo
tu aroma fue más allá de los días
crepúsculo de mis sombras sin prisas.

Esta noche vienes a mi presente
dádiva que me colma de deleite.