(El tiempo de tus brazos)

(El tiempo de tus brazos)
Escucha el viento suave de la torre de orquídeas, esa torre la que un día replicaron cuando en la plaza te conocí, esa que un día te defendió de las miradas de la gente envidiosas,
Esa torre que todas las mañanas, te hacía sentir dolor en tus oídos con el sonido de las campanas, y tus ojos lloraban llenos de ojeras, cierra la ventana para que no entre el viento silencioso, y de pues cógeme y abúsame con tu boca y tus labios carnosos,
Y bésame en esta oscuridad sin piedad con los labios de tu boca,
Mírame con la luz del resplandor de tus ojos, y dame agua fresca para calmar la sed de mi boca, caminemos hacia la montaña y recordaremos las heridas, con el sonido que levanta las campanas, rózate conmigo y calmaras toda la sed de amor que tengo,
Dame tus manos y notaras el calor que tengo de la locura de tu cara por mi amor,
No te quites la ropa porque tu desnudez dios mío me destroza, linda mujer tu desnudez me devora, clávame tus celos con el destello de tus ojos, con las espinas del albor lleno de rosas,
En cierra mi silencio con las rosas que te regale y el beso que te di el día que te dije si quiero,
Escucha el tiempo y el viento en silencio, y abrázame y enséñame esos besos deliciosos,
Dándome el castigo al finar del camino, y vuelve a mí a través del viento por mi ventana,
Y clávate en mi por siempre dándome el placer para siempre,
Y lléname de besos con tu boca y labios de pétalos de rosas mujer hermosa,