Notas.

poema de La Marginada

En un segundo se levantó de la cama y se dirigió al cuaderno que reposaba sobre la mesa.
- ¿qué haces? - pregunté.
- escribo notas.
- ¿qué notas?
- sólo notas. Es mi cuaderno de anotaciones; tú también tienes uno, el amarillo que siempre cargas.
Mi interés se intensificó al percatarme de un dibujo que se dejó apreciar en el momento justo en que cerró dicho cuaderno. El dibujo de una mujer.
- iré a la cocina, ¿quieres agua? - dijo mientras limpiaba sus lentes con la playera.
- no, gracias.
Al marcharse, me dirigí de forma apresurada a donde mi bolsa para así tomar mi cuaderno amarillo.
- ¿qué haces? - preguntó cuando volvió.
- escribo notas.
- ¿qué notas?
- sólo notas. Es mi cuaderno amarillo de anotaciones, tú también tienes uno.