Azul amor
Las montañas como gemelas reían al amanecer,la diosa lunar inválida su brillo...
Y por el campo la vegetación con su poder
La madre tierra,
Una maravilla astuta y benévola.
Por un lado, él río,
Que suavidad exquisita y espiritual es el agua se precipita allí en las rocas
Cómo la voz sonora de un coro sagrado.
Y allí una cabaña de madera toda.
con una chimenea que siempre parecía locomotora.
Donde subías a ese magnífico sentimiento de estar acompañado en soledad.
También las aves de distintas especies
Acompañaban a un zorro rojizo que esperaba
Y esperaba escondido en la maleza.
Quería saborear esa cosa estraña
Llena de plumas...
Atrapar alguna gallina de Don Eduardo,era su ahelo.
Por otro lado son Eduardo,no quería herir
Este amigo rojo.
Y le dejaba algo de carne por allí en los árboles.
El bosque del otro lado del río parecía,la puerta
Perfecta para perderse cómodamente.
Don Eduardo había nacido allí, nunca quiso formar familia.
Se frustraba al pensar en eso,por eso rápidamente salía del salvaje pensamiento.
No pudo enamorarse nunca más.
Solo una vez...
Estos son sentimientos de un rey
Que había perdido a su única reina.
Cuando entraba en el bosque
En su mente don Eduardo, imaginaba la censura de su padre.
Matar para comer...
Y él amor infinito por la naturaleza de su madre.
Su madre decía ; "Todo tiene un espíritu "
Y una razón de ser.
Por eso nunca cargaba con balas de verdad...
Hacía trampa...
tiraba y fallaba el tiro.
A propósito y con sonrisa leve.
Eran Salines que lastimaban pero no mataban.
En realidad,nunca había matado para satisfacer su hambre.
Nunca llevó alguna liebre o conejo a su casa.
Entonces ese día
pensó "este será el último día".
Comeré pescados o huevos el resto de mí vida.
"Se sonrió "
A don Eduardo le gustaba mucho
Ver el atardecer en un caminito
Empedrado.
Donde de lado a lado había árboles frondosos con flores de colores blancas.
Desprendidas de ese olor que solo el laboratorio de Dios puede crear.
El perfume tan exquisito de sus hojas.,
No existe
En ningún perfume de esos caros
Que se venden por ahí.
Allí cerca estaba enterrada su mamá.
Allí prendía su pipa y sonreía al ver algún insecto raro trepando la vida.
Para don Eduardo, todo tenía razón de ser.
Y cuando descansaba en su portal con su café recién hecho,pensaba en historias.
Algunos dinosaurios y monstruos marinos
Claro que todos los insectos de su alrededor ayudaban
En esta aventura de soñar...
Entonces parecían bestias los insectos,
A veces llevaba su equipo de microscopio
Y veía que ciertamente, cada uno haciendo su trabajo.
Con vigor, la hormiga colorada defendiendo fronteras con la hormiga color negro ,
Dos guerreras en lucha...
Pronto anochecía,decidió ir a tomar su café al lado de su fuego que con leña amable se enciende.
Un día estaba preparando ese café delicioso
Que se aplasta y se prepara las semillas
Crujientes del buen café..
Como si fuese un ritual .
Y ese olor a café invade toda la habitación.
De repente una pluma,suavemente ve caer
A su lado...
Mira para arriba,sin embargo,sus techos fuertes y recién lubricados estaban.
Va hacia la ventana y mira y solo ve a pancho,
Su perro mañero,
Jugando y molestando a tina su gata.
Toma la pluma y extrañado nota
Que era muy suave.
La deja arriba de un mueble y se olvida.
Al otro día,su trabajo en su establo,no puede esperar...
Cuando de repente estaba atendiendo a su caballo.
Y otra pluma ve caer a su lado...
Mira otra vez para arriba y le dice a su yegua
Ya vengo bonita"...
Mira hacia arriba y sube con las escaleras .
Pensó que puede haber algún nido por ese lugar...
"Nada de nada".
Bueno, extrañado,termina sus tareas.
Pancho ladra sin parar para él lado del bosque.
Don Eduardo sale y no ve nada.
Le acaricia la cabeza a pancho y pancho está inquieto.
En unos días llegaría el torrente invernal.
Don Eduardo debe preparar todo para la nieve...
Estos lugares son muy bonitos,pero si no sabes cómo sobrevivir allí,todo sería de un sabor amargo.
Don Eduardo estaba con su hacha cortando los troncos.
Y de repente ve iluminado justo debajo del árbol de eucalipto una sombra.
Mira de nuevo y se atemoriza y se cubre con su hacha...
Un Alcón...
Y es azul...
Woooo! ( esboso)
Un hermoso Alcón color azul...
Los ojos de Eduardo reflejaban la puerta
Quería correr y meterse a la cabaña...
Pero el Alcon azul lentamente se movió a otra rama lejos
Para no asustarlo.
Don Eduardo ve que tiene una herida en su ala
Se acerca lentamente
Y el Alcón baja su cabeza con orgullo su herido.
Le habla y dura cuatro horas esa conversación.
Empezó anochecer ,la luna curiosa empezó asomarse para saber el resultado de este encuentro.
Hasta que el Alcón se deja tocar.
Don Eduardo lo cura en el establo
Y lo deja en un lugar apacible.
Luego de unos dos meses
Alcon azul lentamente abre sus hermosas alas.
Don Eduardo le deja la puerta abierta
Para que vuele
Sin embargo Alcón azul lentamente
Se posa en los hombros de Eduardo.
Sus garras pueden lastimar y mucho.
Pero no ...
Fue como un pisar de verbos suaves y caricias de nubes
Que puede explicar el agradecimiento.?
Cómo se puede explicar la ternura con solo poseerse?
Quien detalla el amor, si este lazo ya es inquebrantable?...
Pues yo no sé.
No se va.
Alcón azul ,no se va.
No vuela a la libertad preciada.
Solo vuela unas dos horas desaparece y vuelve.
El hombre queda admirado y generosamente agradecido,
Los dos fueron bondadosos.
Uno por no atacar y el otro por ayudar.
Dos amigos.
Dos espíritus ahora viven en lo alto de ese valle montañoso.
Esa amistad plena y tan generosa
De dos almas solitarias.
Agradecidas ,felices de compartir.
Está tierra llena de oportunidades.
Alcon azul le presentó a su novia
Pero eso es para otra historia de amor.
Comentarios & Opiniones
Me atrapó el relato desde el principio a fin. Excelente trabajo y un final feliz. Tal vez las plumas sean un presagio que Don Eduardo comenzará a escribir sus vivencias.
Saludo cordial!
Veamos. Desde punto de vista subjetivo un interesante relato donde se hace relevante su aparición de un cordial ave rapaz azul, surgiendo amistad con el solitario Don Eduardo. Desde visión objetiva puede ser que haya surgido cierto rechazo a ponerle
se "h" al plumífero acompañante de don Eduardo, entonces en la mente busqué la causa luego de esperar un tiempo a que aparezca con su "h"...¿Le daría así cual nombre propio? , ¿será por causa del conflicto en medio oriente?...ocurre que esa "h" viene
del hebreo por los fenicios...ya, menudo lío tratando hallar de la causa. ¿Acaso rebeldía contra la tradición académica española? ¿QUÉ ANOTO?, DIJE. ¡Pues, ya está! Y tal cual ha motivado ese Alcón Azul.
Envío cordial abrazo saludable.
¡ Qué largo ! y esa foto la hiciste tú ? .
Buen trabajo y buena la imagen .
Tengas buen día por Argentina Silvia , cuídate por allí .
Que interesante historia de amor, quedaré al pendiente de cómo Halcón Azul le presentó su novia a Don Eduardo, siempre un gusto la visita mi querida amiga, abrazos y feliz fin de semana hasta Argentina.
Que bonita lectura Silvia.
Entre esa prosa poética y el buen hacer para narrar un cuento, atrapa a cualquiera.
A mí me has hecho viajar a ese paisaje tan bello y profundo.
Gracias por compartir.
Cariñoso abrazo poeta.
Amigos míos!!!
Los valoro y los amo gracias!!!
Por su tiempo y cariño.
Abrazo sincero.
Besos a todos.