Mí Dios

poema de San Brendano

Ser tuya en el límite de tu cuerpo
Sabiendo como morir y desaparecer en tu angustia y sin sentir el deseo de tu boca, Yahveh, ser lo que es sin hablarte en los destinos de mí alma. Esto es lo que siento. Y te amó con locura sin saber que te poseo. Y hablará mí alma de ti y hablará mí ser de lo que eres. Y estoy llamándote con el alma y te estoy invocando con la mente y en el soplo de mí voluntad sé que no eres mío. Porqué mí voluntad te posee y donde sea que vaya llevó tu simiente, en la profundidad de mí ser donde te poseo...